Aunque la Terapia Asistida con Animales (TAA) 
es una terapia no farmacológica que está recibiendo en la actualidad mucho interés en su aplicación en centros gerontológicos, la creencia de que el contacto con los animales puede responder a ciertas necesidades de personas con muy diferentes patologías ha continuado desde hace más de cien de años hasta nuestros días. De hecho, en 1792 se realizaron las primeras experiencias de animales utilizados con fines terapéuticos, concretamente se emplearon conejos y aves de corral en un centro de Inglaterra para personas con problemas emocionales. En la actualidad son muchas las instituciones privadas y públicas las que han apostado por su beneficiosa aplicación a muy diferentes colectivos (personas con síndrome de Down, personas con patologías físicas, etc.) utilizando diferentes tipos de animales (perros, caballos, defines, etc.), y son también muchos los centros dirigidos a personas mayores los que ha incluido dentro de sus actividades a animales como perros y gatos.
En lo referente a las personas mayores, a la TAA se le atribuyen beneficios a todos los niveles, incluyendo aspectos psicológicos, físicos y sociales. De éstos, el más significativo es el papel que el animal puede desempeñar en la potenciación del interés del paciente hacia su entorno, favoreciendo así su interacción con los otros, empleando tanto comunicación verbal como no verbal. A su vez, los animales ayudan a mejorar el estado emocional de las personas a través del vínculo que se establece entre ambos y al favorecer la relación del mayor con sus semejantes en situaciones propiciadas por la presencia del animal. Además, las personas del centro que preserven determinadas capacidades cognitivas pueden hacerse cargo de su cuidado, lo que incrementa su sentimiento de utilidad y de identidad.
No obstante, para lograr verdaderos efectos terapéuticos es necesario realizar estas actividades dentro de la coherencia y perseverancia de una auténtica terapia no farmacológica
con actividades basadas en objetivos concretos y operativizables, con una metodología propia y guiada por un profesional formado adecuadamente en la materia. Esta formación es ofrecida por el Colegio Oficial de Psicólogos de Madrid en su próximo curso intensivo de Experto en Terapia Asistida con Animales dirigido a psicólogos y que comenzará el 25 de Marzo del 2014 con una duración de 100 horas (40 de ellas prácticas). Algunos de los objetivos de este curso son proporcionar conocimientos sobre etología y psicología del aprendizaje y transmitir herramientas para planificar e implementar las sesiones individuales y grupales con pacientes con un diagnóstico de enfermedad mental.
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